Ví el documental. Me resultó emocionante. Soy ex alumno del CNBA, casi de la misma promoción, aunque no viví en Argentina en el 73-74. "El futuro es nuestro" está muy bien hecha, y se abre a más de una lectura. Con todo respeto, quisiera agregar algo de la mía.
Veo una experiencia trágica, donde sueños adolescentes encuentran su cauce en una organización que reciclaba el pasado católico nacionalista de sus principales figuras en un peronismo imaginado revolucionario y liberador.
Veo hijos de familias de clase media pudiente -los que volvían a casa en el Subte D...-, culposos de su condición y necesitados de "redimirse", de despegarse del cosmopolitismo y volverse "auténticamente" nacionales y populares.
Veo una dirigencia que los usa y se desentiende de su destino.
Veo una generación (la mía) para la que la democracia era un engaño burgués, y el liberalismo (como dice Aragón) una fuente de frustración. Paradojas (o no) del destino: su memoria se recogerá bajo la bandera de los Derechos Humanos, un valor liberal de la Revolución Francesa...
Veo unos chicos que se sentían repentinamente poderosos y que nunca tuvieron poder.
Veo una generación de padres estragada primero por la distancia de sus hijos y después por su horrorosa ausencia.
Veo a alguien reclamando "Perón o muerte" y recibiendo las dos cosas de la mano: a Perón, y a la muerte.
No puedo evitar revivir la sensación omnipotente de esos años adolescentes. Ni dejar de condenar a un peronismo que primero usó sus vidas y en los años recientes usó su memoria.
Construí este blog en el año 2008 con el objetivo de homenajear a mi hermano Claudio a través de los testimonios de la gente que lo conoció.
También fue mi idea publicar noticias acerca de los recordatorios que se fueron haciendo a lo largo de estos años, el juicio (Megacausa Operativo Independencia), el centro clandestino de detención donde estuvo detenido y demás notas periodísticas. Y por último difundir el documental El Futuro es Nuestro, sobre alumnos desaparecidos del Nacional Buenos Aires, de Virna Molina y Ernesto Ardito. Gracias a todos por su testimonios Mariana Slemenson conocisteaclaudio@gmail.com
Contame anécdotas de Claudio, o cualquier relato relacionado con él para que la publique en este blog. Mandame un mail a conocisteaclaudio@gmail.com
Claudio A. Slemenson
Nació el 29 de Enero de 1955 en la Ciudad de Buenos Aires. Sus primeros años los vivió en el barrio de Villa del Parque. Su familia se mudó numerosas veces de modo que asistió a diferentes escuelas primarias. En el año 1968 ingresa al Colegio Nacional Buenos Aires donde cursa toda la secundaria. Durante su adolescencia participa de un conjunto de música llamado “Algo” donde toca la batería. En el año 1973 comienza su militancia en el peronismo. Milita en la Unión de Estudiantes Secundarios (UES) y es nombrado delegado. En el año 1974 ingresa a la Facultad de Agronomía donde sólo llega a cursar las primeras materias.Viaja a Panamá como dirigente nacional de la UES. Conoce a Torrijos. Participa en una reunión de todos los dirigentes del Peronismo Revolucionario, con Juan Domingo Perón.Viaja a Salta (Cafayate) y participa en un campamento que la UES organiza para brindar ayuda solidaria. Estaba en pareja con Rosana J. Szafirstein(detenida desaparecida el 11 de Octubre de 1977). El día 4 de Octubre de 1975 en la Ciudad de San Miguel de Tucumán, en uno de los viajes que realiza por las provincias para reunirse con otros delegados de la UES, es detenido mientras asistía a un asado junto a Raúl Trenchi. En ese mismo operativo secuestraron a Amalia C. Moavro (embarazada) y su compañero Héctor M. Patiño. Todos continúan desaparecidos. En el momento del secuestro Claudio tenía 20 años. Se sabe por testimonios que estuvo unos días en el Departamento de Policía de San Miguel de Tucumán y luego fue trasladado a la Escuela de Famaillá (Centro Clandestino de Detención “La Escuelita”) donde fue visto por una persona que dio su testimonio.
2 comentarios:
Ví el documental. Me resultó emocionante. Soy ex alumno del CNBA, casi de la misma promoción, aunque no viví en Argentina en el 73-74.
"El futuro es nuestro" está muy bien hecha, y se abre a más de una lectura. Con todo respeto, quisiera agregar algo de la mía.
Veo una experiencia trágica, donde sueños adolescentes encuentran su cauce en una organización que reciclaba el pasado católico nacionalista de sus principales figuras en un peronismo imaginado revolucionario y liberador.
Veo hijos de familias de clase media pudiente -los que volvían a casa en el Subte D...-, culposos de su condición y necesitados de "redimirse", de despegarse del cosmopolitismo y volverse "auténticamente" nacionales y populares.
Veo una dirigencia que los usa y se desentiende de su destino.
Veo una generación (la mía) para la que la democracia era un engaño burgués, y el liberalismo (como dice Aragón) una fuente de frustración. Paradojas (o no) del destino: su memoria se recogerá bajo la bandera de los Derechos Humanos, un valor liberal de la Revolución Francesa...
Veo unos chicos que se sentían repentinamente poderosos y que nunca tuvieron poder.
Veo una generación de padres estragada primero por la distancia de sus hijos y después por su horrorosa ausencia.
Veo a alguien reclamando "Perón o muerte" y recibiendo las dos cosas de la mano: a Perón, y a la muerte.
No puedo evitar revivir la sensación omnipotente de esos años adolescentes. Ni dejar de condenar a un peronismo que primero usó sus vidas y en los años recientes usó su memoria.
Publicar un comentario